Tomates secos en mitades (125gr.)

Tomates secos ecológicos en mitades, Naturdis. Un ingrediente versátil que podemos usar en diferentes recetas. Desde aperitivos a salsas. Un «must have» en la cocina mediterránea y en la italiana en particular.

Usamos sólo tomates rojos maduros, sanos y de sabor intenso. Se lavan y se seleccionan a mano, se cortan en mitades, se vuelven a lavar y se secan al sol. Se les añade una cantidad mínima de sal marina ecológica que, ayuda a intensificar su sabor y los conserva durante más tiempo. Sin conservantes ni potenciadores de sabor.

Aunque los tomates secos ecológicos pierdan toda su agua durante el secado, no pasa lo mismo con su aroma, nutrientes y vitaminas. En particular las vitaminas E,K y B que contienen, se mantienen en forma más concentrada. Tienen un sabor más intenso, más concentrado que los tomates frescos. Con un grado de acidez equilibrado, se presentan en mitades de color rojo brillante a rojo oscuro.

Hay a quienes les gusta tomarlos tal cual. Pero, también hay un montón de recetas en las que puedes utilizar los tomates secos ecológicos de Naturdis.

– Combínalos con piñones y rúcula para condimentar una ensalada de pasta.

– Prepara un pesto rojo, picando los tomates, añadiendo almendras tostadas, un poco de albahaca, ajo y aceite de oliva virgen extra.

– Córtalo en tiras y añádelo a tus ensaladas con mozzarella. O utilízalo como ingrediente de aliños y vinagretas.

– Pruébalos sobre una tostas «bruschetta» aderezada con aceite de oliva y albahaca, ¡una delicia!.

– Exquisitos también en pizzas, con aceitunas negras y bonito.

– Enriquece con ellos tus salsas de tomate para pasta. Intensificarán su sabor.

Receta de tomates secos ecológicos en aceite

Hidratamos los tomates en agua templada. Puedes añadirle un poco de vinagre, si quieres darles un puntillo más ácido.

Cuando adquieran volumen, se sacan sobre un paño limpio para que escurran (boca abajo y sin estrujarlos!) y se van disponiendo en un tarro limpio con los aliños que más nos gusten: un poco de sal, dientes de ajos pelados o enteros, hierbas aromáticas, especias, etc.

Se cubren entonces con un buen aceite de oliva virgen extra, se tapan y se dejan reposar al menos una semana antes de consumirlos.